Cuando tu enemigo puede convertirse en tu hogar. En el año 154 a. C., la joven aristócrata Cassia se ve embarcada en un viaje accidental a Hispania, donde los feroces celtíberos se han rebelado contra el poder de Roma. Su intención es zarpar de vuelta a casa en el primer barco, pero sus planes se truncan cuando se convierte en la prisionera de una tribu de salvajes y debe casarse con su líder, Leukón, para sobrevivir.
Atrapada en la ciudad de Numancia, Cassia se siente cautivada por el primitivo y fascinante mundo de los celtíberos y por la nobleza de su esposo bárbaro. Y comprende que debe tomar una decisión: permanecer fiel a Roma... o entregarse a su nueva vida a pesar de la guerra que amenaza con destruir aquello que ama.
Lo primero que llamó mi atención a la hora de leer esta novela fue la época en la que transcurre la historia. Año 154 a.C, la Hispania celtíbera se ha rebelado contra Roma y concretamente se centra en las guerras de Numancia, cuyos habitantes pusieron en jaque al ejército romano durante años y soportaron un asedio de varios meses, y los cuales prefirieron morir y destruir la ciudad antes que rendirse ante Roma. Una época de lo más inusual en una novela romántica.