Los ojos de Jason Warwick son del color del preciado índigo que reina en los bazares del Indostán.
Los ojos de Carmentia Ingram son insondables, misteriosos como los prodigios de Oriente.
Él es un rudo capitán inglés, un hombre de honor destinado a servir a su país en una India que se convulsiona bajo el mando del Raj británico. Lo que no sabe es que también puede ser un hombre apasionado cuando tiene a la mujer que menos se espera entre sus brazos.
Ella solo desea una existencia tranquila en Londres, a cargo de sus hermanas menores. Pero un viaje a un pequeño estado cercano a Calcuta se interpone en su camino y la obligará a dominar el miedo que acecha en su corazón.
Hay novelas que te transportan a lugares lejanos, que te hacen sentir emociones intensas, y en las que su historia te envuelve de tal forma que no puedes dejarla ni un momento hasta el final. Oriente en tus ojos es una de esas novelas. Me ha transportado a los exóticos paisajes de la India colonial británica del siglo XIX, he sufrido y me emocionado con las situaciones en las que se ven envueltos sus protagonistas y me ha atrapado la historia de principio a fin.